Lo que más me sorprende del hombre occidental
es que pierden la salud para ganar dinero,
después pierden el dinero para recuperar la salud.
Y por pensar ansiosamente en el futuro
no disfrutan el presente,
por lo que no viven ni el presente ni el futuro.
Y viven como sino tuviesen que morir nunca,
y mueren como si nunca hubieran vivido